Sí
Damian, ahora sí, ahora puedo pensar en tí sin sentirme culpable de lo
sucedido, hoy sin saber como pensé en tí.
Ahora sé que estas feliz porque sabes que yo ahora entendí, comprendí,
el proqué de todo.
No es tu cumpleaños, ni uno de esos dias en
los que la pasabamos charlando, sentado en la puerta de cualquier casa
abandonada, ni es tan poco ningún día en especial, es bueno sí es
especial el día proque hoy comprendí.
Por eso Damián mi amigo hoy te recuendo sin
culpas, hoy sé que ya al fin estarás tranquilo.
Aún recuerdo muchas cosas, todas nuestras
palabras, conversaciones, como no reiamos, llorabamos eramos
adolescente, vecinos, compañeros de curso y amigos, nunca, nunca
olvidaré esa palabras que un día oí salir por tus labios, dirijidas a
mi marido, cuando estaba recien casada:
"Cuidalá Canario, te llevas lo mejor de mi
vida"
Bien sabes Damián
que me cuida, que me Ama y yo lo Amo, sé que te dolió mi casamiento,
como a mi lo que te sucedió a tí, pero tú aceptaste y comprendiste mi
decisión, yo no comprendí como tú lo que te sucedio a tí, hata hoy tu
patida, tu marcha.
Pero ahora ya lo comprendo estoy feliz, sé que nunca podré olvidar ni
nuestras charlas ni nuestros lindo momento, mi amigo, pero ya no me
siento culpable, de lo sucedido pues sé que así fué m que tenía que
suceder, y sólo Dios save el porqué?.
En lugar de rosas
en tu camino esa noche de abil puso un árbol que te costo la vida, y
tanto me hizo sufrir al verte en estado de coma, y ver com solo aún
estando en como esperaste a que te viera, te hablara para que
reaccionaras, no querias partir, sin que yo te viera, sin que te
dijera:
"Vecino, ¿que
pasa?, venga tenemos que ir de juerga"
Cuanta fué mi
emoción al ver que se movia más rápido el ritmo de tú corazón,
mantenido por máquinas.
No podias hablar, pero habló tú corazón y hasta los médicos decían:
"Sigue hablaré
más sólo ha reacciona contigo".
Pero era evidente
que era la hora de tu marcha, de tu partida, a los dos días morias.
Ahora sé que eres feliz, pues se que esperaste a que fuera a verte,
necesitabas comprobar que era feliz, y que aún lo soy, ese canario me
Ama, tanto como yo a él, tanto como el nosotros nos amamos de niños,
sé que nada que ver tuvo el que te deja por el que hoy es mi marido,
sé que Dios te llamó para que empezaras a su lado, éL llamó a tú
puerta y con él estas ahora, feliz, sonriendo con ese hoyuelo que se
te hacía en las mejillas al sonreir.
Gracias Dios por
hacerme comprender y aceptar la marcha de mi amigo, gracias por
cuiadar de él y de todos.
Gracias por la
vida, que das a los que están a tu lado en el Cielo y a los que
estamos en la tierra.