Datos principales:
Tenerife perteneciente al archipiélago
de las Canarias, la mayor de todas en extensión,
con 2.057 km2, que cuenta con una población de 623.823
habitantes (1991).
Medio físico:
Tenerife tiene forma de triángulo
isósceles, con el vértice al S (Punta Rasca), una larga
prolongación hacia el NE (el cabo de Anaga) y la Punta
Teno en el ángulo NO.
Presenta un relieve irregular interrumpido por la
altiplanicie de Los Rodeos (600 m de altitud) y los
valles de La Orotava (al N) y Güímar (al S).
Destacan el macizo de Anaga, la caldera de Las Cañadas
(pico de Guajara, 2.800 m) —en cuyo interior se ha
levantado el conjunto montañoso de El Teide (3.718 m),
la cumbre más alta de todo el territorio español— y la
montaña de Gala (1.334 m).
El litoral, con un perímetro de 269 km, presenta una
costa alta y acantilada en el N, frente a la costa más
baja en el S, en la que alternan las playas y los
roquedos.
La red fluvial insular se reduce a una serie de
barrancos de curso de agua intermitente, donde vierten
las aguas de escorrentía y aquéllas procedentes de las
numerosas fuentes y nacientes que existen en la isla.
Entre los más importantes figuran los de Tahodio, Hondo,
Pedregal y Las Monjas (en la vertiente oriental),
Abrunco y Vergara (en la septentrional), y Agua, Erques,
Fañabé y Rey (en la sudoccidental).
Clima:
Clima subtropical de tipo marítimo con
escasas oscilaciones térmicas y pluviométricas.
La vertiente septentrional es más húmeda y contrasta con
la meridional, más seca.
En función de la altitud se distinguen tres zonas
climáticas:
Zona baja o costera (por debajo de los 300 m), con
elevadas temperaturas medias y escasas precipitaciones;
tal es el caso de Santa Cruz de Tenerife, donde se
registra una media de 20º C y 702 mm.
Zona intermedia (entre 300 y 900 m), con temperaturas
más bajas y mayor pluviosidad (p. ej. La Laguna, con 16º
C y 580 mm).
Zona alpina (por encima de los 900 m), con bajas
temperaturas y elevado índice de lluvias (p. ej. Izaña,
con 9,5º C y 630 mm).
Flora:
Las características del clima
tinerfeño favorecen el desarrollo de una vegetación
tropical, que ofrece el típico escalonamiento en altura.
Abundan las plantas xerófilas en las tierras bajas y,
sobre ellas, el moteverde, especialmente en el N de la
isla, con ejemplares de laureles y brezos.
A mayor altura aparece el pinar, rodeando el Teide; más
arriba alternan las retamas y los escobones con campos
de lava desnudos; en las cumbres se encuentra la violeta
del Teide.
Especial interés merece el Parque de Anaga, tanto por su
sorprendente riqueza florística como por su alta
variedad faunística, constituida sobre todo por
invertebrados.
Población:
La elevada tasa de natalidad y, en
menor medida, la inmigración procedente tanto de las
otras islas como de la Península son la causa del
vertiginoso crecimiento de la población durante el siglo
XX: 137.302 personas en 1900, 183.844 en 1910, 189.931
en 1920, 224.329 en 1930, 261.963 en 1940, 321.949 en
1950, 394.466 en 1960, 473.971 en 1970, 557.191 en 1981,
623.823 en 1991 y más de 780.000 en 1998.
La población se concentra en la vertiente septentrional,
más concretamente en la aglomeración de Santa Cruz de
Tenerife (772.449 habitantes en 1998).
Administración y Gobierno:
La isla de Tenerife es uno de los
siete territorios insulares que integran la Comunidad
Autónoma de Canarias.
Pertenecen a la isla los siguientes municipios: Arafo,
Arico, Arona, Buenavista del Norte, Candelaria, Fasnia,
Garachico, Granadilla de Abona, La Guancha, Guía de
Isora, Güimar, Icod de los Vinos, La Matanza de Acentejo,
La Orotava, Puerto de La Cruz, Los Realejos, El Rosario,
San Cristóbal de La Laguna, San Juan de La Rambla, San
Miguel de Abona, Santa Úrsula, Santiago del Teide, El
Sauzal, Los Silos, Tacoronte, El Tanque, Tegueste, La
Victoria de Acentejo, Vilaflor y Santa Cruz de Tenerife,
la capital insular.
El órgano de Gobierno y administración insular es el
Cabildo, que tiene autonomía plena en los términos que
establece la Constitución (REC 1978/2836) y su
legislación específica conforme al artículo 32 del
Estatuto de Autonomía de Canarias aprobado por Ley
Orgánica de 10 de agosto de 1982, que es su norma
institucional básica.
Historia:
El territorio de la comarca de Anaga
fue lugar de asentamiento de los guanches, quienes lo
convirtieron en uno de los nueves menceynatos en que
estaba dividida la isla.
En estas tierras reinaron el mencey Beneharo y el
Hidalgo Pobre Zebenzuy, señor del pequeño cantón de La
Punta.
Todavía hoy quedan testimonios de su presencia en las
cuevas de la costa y en los nombres del lugar: Tenejía,
Tesegre, Ahuire, etc.
Tras la conquista castellana, que no se materializó
hasta el 1496, una vez colonizadas las restantes islas
del archipiélago se establecieron los primeros pueblos y
se abrieron caminos que conducían a La Laguna, antigua
capital de la isla.
Entre los años 1833 y 1927, Santa Cruz de Tenerife fue
capital de las Canarias; a partir de 1927, con la
división de las islas en dos provincias, Tenerife pasa a
formar parte de la provincia de Santa Cruz de Tenerife.
Arte y Cultura:
El poblamiento guanche en la isla de
Tenerife, como ya se mencionó anteriormente, está
localizado preferentemente en la comarca de Anaga, donde
abundan las cuevas y grutas naturales.
La mayor existencia de pastos para el ganado y la
relativa abundancia de agua potable en los valles de la
ladera norte favorecieron el establecimiento de las
poblaciones más numerosas y estables, si bien durante el
verano los pastores se trasladaban a las alturas
centrales de la isla en busca de forraje, lo que provocó
el establecimiento de otro tipo de hábitat en refugios
artificiales o cercados para su utilización ocasional.
La única construcción que se aleja de este modelo de
abrigo de montaña se encuentra en la zona costera del
sur de la isla, concretamente en el término de San
Miguel de Abona. Se trata de una edificación singular de
planta circular con postes de madera sostenidos por
basamentos de piedra y tabiques de pieles o ramaje entre
los intercolumnios, a modo de paredes, en cuyo centro
existe un hogar de forma hexagonal, donde se han
encontrado restos de animales sacrificados. Algunos
especialistas consideran que se trata de un santuario
religioso, mientras que otros piensan que tan sólo es
una cabaña circular con hogar central. La religión
guanche, al parecer, careció de recintos sagrados o
templos monumentales donde practicar su culto.
No ha permanecido ningún lugar de culto, ni siquiera de
la divinidad suprema, conocido en Tenerife como Abreu
Galindo, "el sustentador de cielo y tierras".
No obstante, la carencia de arquitectura monumental
religiosa no impide la existencia de lugares de
ceremonias, como el que se encuentra en las cimas de
Taganana, en Santa Cruz de Tenerife.
Legado primordial del pueblo guanche es la cerámica en
barro cocido, de sorprendente simplicidad y austera
decoración, cuya vasija más representativa es la
conocida como Gánigo.
La mayoría de los hallazgos son vasos de fondo esférico
o cónico, nunca plano, de tono marrón, a veces oscuro,
con algunas variantes.
Una de las variedades más singulares es la que presenta
un asa perforada en forma de pitorro (que también puede
aparecer duplicado en el otro extremo del diámetro) o
con mango macizo y vertedero perforado.
Otras formas cerámicas menos abundantes son los platos y
cuchillos de terracota.
La decoración aparece en la proximidad del borde o en el
mismo borde y, por lo general, es incisa, impresa,
punteada o excisa.
También han aparecido centenares de cuencas de collar,
para adorno personal, tanto en cuevas de habitación como
en grutas funerarias.
Junto a estos collares de cerámica prodigan los hechos
con conchas, trozos de hueso, madera o vértebras.
Finalmente, el vestido utilizado por los indígenas
tinerfeños estaba formado principalmente por pieles
curtidas de cabra u oveja, si bien no han permanecido
huellas de colorido impreso o aplicado en los mismos.
La mayoría de los monumentos que dan carácter a las
poblaciones de la isla son posteriores al siglo XV,
erigidos tras la conquista castellana.
Entre los edificios religiosos destacan la catedral de
La Laguna, que alberga preciosas joyas artísticas, la
iglesia de la Concepción, en Santa Cruz de Tenerife, y
las iglesias del valle de La Orotava, de marcado estilo
colonial.
También se conservan diversas construcciones de carácter
defensivo, como el castillo de San Cristóbal, del siglo
XV, en Santa Cruz de Tenerife; y el de San Miguel, del
siglo XVI, en Garachico.
Los monumentos conmemorativos son escasos; sin embargo,
destaca el de El Triunfo de la Candelaria, obra
realizada por Casanova en el año 1778, también en Santa
Cruz de Tenerife.
Sin duda, el Carnaval de Tenerife es uno de los festejos
tinerfeños de obligada referencia.
Declarado de interés turístico, es uno de los más
famosos de España. Se celebra en toda la isla, pero es
especialmente espectacular en Santa Cruz de Tenerife.
Durante seis días cientos de comparsas y rondallas, con
vistosos disfraces, que cantan y bailan a ritmo
tropical, recorren las calles de la capital.
Uno de los actos más conocidos de la fiesta es la
cabalgata de presentación, en la cual desfilan todos los
grupos que participan en el Carnaval.
Además de los Carnavales de la capital destacan los del
Puerto de la Cruz.
La mayor parte de las poblaciones tinerfeñas, además de
Carnaval, celebran romerías populares y festividades
religiosas en las que, a menudo, aparecen cantos y
danzas de los aborígenes.
Los nombres de algunos bailes, como el tajaraste, el
tanganillo o las saltonas, proceden directamente de los
guanches.
Ahora...vamos a conocer esta preciosa isla un poquito
mas!
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HIMNO DE CANARIAS |
|
SER CANARIO ES MI RAZÓN |
|
PINTADERAS CANARIAS |
|
LOS GUANCHES |
|
TENERIFE, UNA
ISLA DE MUSEOS |
|
CARNAVAL,
COLOR Y FANTASÍA
CARNAVAL 2008
(1)
CARNAVAL 2008
(2)
CARNAVAL 2009 |
|
FAUNA Y FLORA |
|
LOS ASTROS DE
TENERIFE |
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HIMNO NUEVO |
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GARA Y JONAY |
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REPLICA
TIMPLE CANARIO |
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